Por: Saúl Rodríguez/@SaulRG_21

Treinta años tuvieron que pasar para que un receptor volviera a ganar el Trofeo Heisman del fútbol colegial, y la estrella de Alabama, DeVonta Smith, se convirtió en el cuarto en la historia en su posición en hacerse con el galardón, rompiendo así la hegemonía de los quarterbacks que resultaron ganadores en los últimos años.

Smith superó en las votaciones a Trevor Lawrence, Mac Jones y Kyle Trask, tres quarterbacks que fueron superados ampliamente por la estrella del Crimson Tide, coronando así una temporada brillante donde registró 105 recepciones, 1641 yardas y 20 touchdowns. Antes de dar el salto a la NFL, el receptor de Alabama aún tiene un último juego pendiente en su carrera colegial, donde enfrentará a Ohio State por el Campeonato Nacional del College Football.

Tras obtener el premio, Smith agradeció a sus compañeros, declarando qué «con el éxito del equipo viene el éxito individual. Así que, sin todos ustedes, no estaría donde estoy hoy, ganando este trofeo«. El 2015 fue el último año donde un jugador no quarterback fue galardonado con el Heisman, cuando Derrick Henry fue proclamado como el mejor jugador colegial. Así, DeVonta se une a Desmon Howard (Michigan), Tim Brown (Notre Dame) y Johnny Rodgers (Nebraska) como los únicos receptores en la historia en obtener el trofeo.