Por: Juan José Ibarrola Dávila.

El día de ayer se hizo oficial el traspaso de sede del club Morelia a Mazatlán bajo la excusa que con ésto, el puerto de Mazatlán crecerá económicamente, hasta se construyó un estadio digno de primera división, aproximadamente 460 millones de pesos fueron designados para este nuevo estadio.

Aquí los verdaderos afectados son los aficionados, los jugadores y cuerpo técnico. A los aficionados les quitaron el amor y la pasión de ver a su club jugar. A los jugadores y cuerpo técnico les quitaron la ilusión de ser campeones.

Claramente la polémica generada por este cambio de sede no se hizo esperar; jugadores, técnicos, aficionados, periodistas, bueno, hasta el estadio Morelos (donde jugaba Monarcas) reaccionó a través de twitter.

Jugadores.

El ex-portero de Monarcas Federivo Vilar, expresó su tristeza: «Seguiría la prédica absurda del farsante que sabe lucrar. Yo me quedo en el instante único del triunfo o derrota pero auténtico, que tanto quieren aniquilar. Fuerza Morelia!!!». Un mensaje con mucha fuerza que sin duda, rompe el corazón; más por quien lo manda.

El defensa chileno Sebastián Vegas agradeció a la cuidad y a la afición: «Me voy lleno de amor, aprendizaje y vivencias que ustedes me entregaron, me llevo un pedacito de cada una de las personas que me hicieron crecer».

Por su parte, el guardameta Angel Malagon dijo lo siguiente: «Las palabras sobran cuando el sentimiento es tan triste, gracias por dejarme ser parte de tu historia».

El portero retirado Félix Fernández expresó su enojo diciendo lo siguiente: «Los cambios sede son parte natural de todo deporte… En serio?, parte natural? En todo caso cuando no hay afición, instalaciones, resultados, interés ni arraigo. Morelia tenía todo eso.»

Es desgarrador ver la frustración e impotencia de los jugadores de ver cómo les quitan el equipo al que entregaron todo su esfuerzo y dedicación, en el cuál, partido a partido dejaban el alma en la cancha.

Concuerdo con Félix Fernández, Monarcas no era el club con más victorias, no era un club que llegara muy seguido a liguilla; pero en el torneo de apertura 2019 nos enseñaron de lo que son capaces, eliminando a León en la primera fase y, aunque cayeron en semi-finales contra el América, nos regalaron la mejor semi-final del torneo.

Periodistas.

La declaración más fuerte se la llevó David Faitelson: «Es una pena. El fútbol se va de Morelia, una plaza llena de tradición y de arraigo con el juego. Los intereses económicos pueden más que los deportivos.»

Raul «Pollo» Ortiz demostró su inconformidad con la Liga a través de un tuit: «Que poca identidad hay en la Liga MX. Liga de primera línea nunca tendremos.»

El comentarista de televisa Xavier Sol, también dio una declaración fuerte: «Están destrozando miles de ilusiones para todo un estado orgullosos de sus Monacras. Están quitándole la alegría a toda una afición y trabando el camino de muchos niños y jóvenes que defienden sus colores.

Claro está que los dueños de los equipos pueden hacer lo que les venga en gana, a fin de cuentas, para eso son los dueños; pero ver como para ellos es meramente un tema económico es algo deprimente. No piensan en ningún momento en que les están arrebatando a miles de personas el club de sus amores.

La más dolorosa.

El capitán del equipo, Aldo Rocha les dio un último regalo a su afición, realizó un emotivo video agradeciendo al club y a la afición. Es imposible contener las lágrimas al escuchar las palabras de quien alentaba a sus compañeros; porque se escuchan las voces de todos los jugadores, de cada uno de los aficionados con el corazón destrozado.

Hoy no solo desaparece un club con más de 70 años de historia, hoy desaparece la ilusión de una afición, desaparece la pasión de los jugadores, el trabajo de miles de personas. Nuevamente lo económico aplasta al amor, al respeto. Hoy se pierde una vez más el significado y el sentido del fútbol.

Hoy perdió el futbol, y con ello, pierden todos los que son devotos a este deporte. Anhelo ver el día que el amor al deporte pueda más que otra cosa.

Maztlán acaba de ganar la dicha de tener un equipo en primera división; gócenlo, aprovéchenlo. Apoyen a su equipo en las buenas y en las malas, viajen con su equipo y hagan que su presencia se sienta en cada rincón de los estadios. Vivan cada partido como si fuera el último, ya que podría serlo.

Y a los seguidores del Monarcas Morelia, no hay palabras para describir lo que están pasando. Gracias por haber hecho a este club tan grande, gracias por enseñarles a todos que es el amor a los colores; que no importa si ganaban o perdían, siempre estaban ahí apoyando a su club.

«Gracias Morelia por enseñarme que la grandeza de un club, no la determinan los títulos.»

Nos encontramos pronto.