Por: Enrique Cano
Temporada 2019, juego de comodín, Titanes vs Patriotas, con un marcador de 20-13, Tom Brady pierde la oportunidad de conseguir su 7mo anillo de Superbowl con los Patriotas de Nueva Inglaterra. “No voy a ningún lado” fue la frase con la que Brady hizo alusión en un comercial para confirmar su continuidad con el equipo de Nueva Inglaterra y poner fin a los rumores que lo posicionaban en una nueva franquicia. Asombro, tristeza, enojo, molestia, decepción y otros tantos sentimientos que sacaron a relucir no solo los fanáticos de los Pats, el mundo entero quedó en “shock” al revisar las primeras planas y presenciar la llegada de Brady al equipo de los Bucaneros de Tampa Bay y así, poner fin a los 19 extraordinarios años de los que formó parte en el equipo más dominante de la NFL en las últimas dos décadas.
Nadie se imaginaba que el mejor quarterback de la historia tras haber ganado 6 Vince Lombardi de 9 Super Bowls que ha disputado con el mejor equipo de la liga, decidiera dar marcha atrás y firmar con un equipo que claro, ganó un Super Bowl hace 18 años ante los Raiders de Oakland, pero que solamente ha clasificado a 2 playoffs y, además, en los últimos 10 años ha conseguido un récord ganador de 10-6 y no clasificó, tras posicionarse 3ro en su división; 2007 es el año en que el nuevo equipo de Tom Brady llegó por última vez a los playoffs de la mano de Jon Gruden, el mismo coach que los guió a coronarse en 2003.
NUNCA CAMINARÁS SOLO
La dupla ofensiva perfecta de Nueva Inglaterra que conquistó el “emparrillado” estaba a la espera de unir fuerzas nuevamente y alzar nuevamente el Vince Lombardi. Rob Gronkowski, ex-ala cerrada de los Pats, aún se encontraba en la etapa del retiro, ganando el campeonato 24/7 de la World Wrestling Entertainment (WWE) y recuperándose de las lesiones que lo acompañaron en su carrera; solo un llamado de su gran amigo Brady bastó para convencerlo de regresar al fútbol americano, pero ahora aterrizando en Florida con el jersey de los Bucs; dos piezas fundamentales para Nueva Inglaterra de las cuales será difícil reponerse.
La mejor carta que necesitaba Brady para formular un nueva línea ofensiva era el mismo Gronk, y no es para menos. Rob es el ala cerrada con la 3er mejor marca de anotaciones en la historia de la NFL con 79 anotaciones y 521 recepciones para 7, 861 yardas; la verdadera pregunta es ¿será suficiente para que veamos a los Bucaneros alzar un nuevo Superbowl para sus vitrinas?.
EL BARCO DEBE ZARPAR
El futuro de los Bucaneros luce prometedor. Para muchos, este equipo con Brady y Gronk, es candidato para llevarse a Florida el campeonato; solo imagínate esto: “Brady y los Bucaneros destierran a los Saints del liderato divisional”, “Los Bucaneros campeones de la Conferencia Nacional, la tripulación llega al Super Bowl”, “Brady resurge y consigue su 7mo anillo”, probablemente esto suceda en la siguiente temporada, pero es necesario dejar de lado el fanatismo y deshilar las variables de la ecuación ante los problemas de los Bucaneros.
Nadie niega que no puedan llegar hasta la última instancia, pero el panorama que circula o que se está pintando no es el correcto; dos jugadores no pueden finiquitar por completo el éxito o el rumbo de un equipo, también depende de la estructura y el arsenal que los respaldan.
La temporada pasada, los Bucaneros obtuvieron una racha de 7-9 lo que no les permitió ni siquiera pelear un puesto de comodín, donde el líder de la división fueron los mismos Saints de Nueva Orleans. El principal objetivo no tiene que ser el campeonato, si en realidad desea conseguirlo, inmediatamente debe formar un equipo más equilibrado; ambas líneas, ofensiva y defensiva, están dañadas.
El mejor arsenal que tiene este equipo son sus receptores, Mike Evans y Chris Godwin; quienes lograron alcanzar en conjunto 2500 yardas y 17 recepciones de touchdowns, lo que beneficiará por completo a los lanzamientos de Brady; fácilmente puede duplicar esa cifra. Por otro lado, Tampa permitió con Jameis Winston una sorprendente cifra de 30-30, 30 lanzamientos de anotación pero con la misma cantidad de intercepciones; Brady apenas ha permitido 14 intercepciones.
Agrégale, que su línea ofensiva sumó un porcentaje de 3 capturas por partido y sólo 3.7 yardas por acarreo; si este equipo no encuentra urgentemente un corredor-receptor que apoye a Ronald Jones, será un dolor de cabeza durante toda la temporada.
Todo equipo debe tener un buen refuerzo en su defensiva, Tampa no lo tiene. De 32 equipos que forman parte de la NFL, los Bucaneros son la 4ta peor defensiva de pases, ya que promedió un total de 28 puntos por partido, a pesar de contar con el líder en capturas Shaquil Barrett. Además, sus esquineros Carlton Davis y Sean Murphy de 336 esquineros, ocuparon los lugares 331 y 326, respectivamente, como parte de los 12 peores de la liga; claramente, Tampa necesita reajustar sus piezas si en verdad desea llegar al máximo evento de la mano de Brady y Gronk.
Insisto, Tampa trajo a dos de los mejores jugadores de la liga, pero si la campaña continúa acumulando estos récords negativos, no habrá Super Bowl para los Bucaneros y la culpa no será de Brady ni de Gronk; el equipo deberá jugar mejor sus cartas con este arsenal si así lo anhela y quiere forjar una nueva era junto al mejor quarterback de la historia.
