El Community Shield fue para los ciudadanos
Por: Pedro Ramos
Este domingo 4 de agosto, se disputó el primer trofeo de la temporada: el Community Shield, entre el Manchester City y el Liverpool FC. Ambas escuadras levantaron trofeos la temporada pasada, los de Pep Guardiola consiguieron el primer póquer de trofeos locales en Inglaterra, al ganar el Community Shield, la Copa de la Liga, FA Cup y Premier League. Por su parte, el club Red se coronó campeón de la UEFA Champions League y terminó la sequía de 14 años sin levantar el máximo trofeo europeo.
Un gran ambiente se vivió en el estadio de Wembley, mucha afición por parte de ambos clubes, y no era para menos, pues se disputaba un titulo importante desde el principio de la temporada. A esto podemos añadir que los equipos en el terreno de juego son los que están «de moda» en el futbol británico.
Pep vs Kloop, Agüero vs Salah, Alisson vs Claudio Bravo, Van Dijk vs Stones; este partido nos auguraba un espectáculo nunca antes visto. Y no decepcionó, desde los primeros minutos el esférico rodó de lado a lado en el terreno de juego. Y con goles al minuto 12 (Sterling) y al 77´(Joel Matip) este gran choque se decidió desde la tanda de penales.
Ya desde los 11 pasos, Shaquiri y Gundogan hicieron lo propio, sin embargo, el héroe de la remontada red ante el Barcelona, Giorgino Wijnaldum no cumplió con lo suyo y su penal fue atajado por Claudio Bravo. Bernardo Silva no tuvo piedad y anotó su penal. Lallana y Foden mojaron las redes, al igual que Oxlade-Chamberlain y Zinchenko. Y finalmente, el último tiro decisivo para el Liverpool llegó a los pies del faraón egipcio Mohamed Salah, quien no titubeó y con gran temple y convicción anotó su pena máxima, lo hizo todo bien, si el título no era de su club, esta vez no recaería la culpa en el.
Fue entonces cuando la presión llegó al referente de ataque skyblue: Gabriel Jesus, jugador brasileño que levantó polémica en la final de la Copa América después de hacer un gesto a las cámaras al salir expulsado en el duelo decisivo del torneo sudamericano; el 9 del City jamás dudó en su tiro y, con un poco de ayuda de Alisson, el balón entró a la meta red y con ello, le dio el primer título de la temporada a los dirigidos por Pep Guardiola, un nuevo título para la enorme vitrina del entrenador español, una nueva ilusión para los miles de aficionados del Manchester City y una nueva razón para aumentar la sed de revancha de los fans del Liverpool.
